Lecturas para la transformación social
El círculo de lectura ‘Articuladores de lo posible’ se creó como una experiencia de conversación con libros, comenzando precisamente por el texto del que soy autor y con la idea de tener una vivencia de escucha y de reflexión guiada. Transcurridos sus primeros 100 días, podemos asegurar que se fortalece en su circularidad y que a la vez expande sus límites en cada reunión, tomando nuevas e inesperadas dimensiones.
En las próximas líneas quisiera compartir algunas de las conclusiones que quienes lo integramos hemos declarado acerca de la movilización producida en este espacio de pensamiento, y sobre las emociones que han ido apareciendo.
Nos embarcamos juntos en esta aventura reflexiva y de crecimiento sin intuir que podría convertirse en una forma de coaching a nosotros mismos. La lectura avanza, con pautas de preguntas, como un acompañante que nos señala posibilidades, sí. Pero las conclusiones y las reflexiones personales y colectivas son el fruto de conversaciones profundas entre los lectores y los libros, y entre los participantes del círculo entre sí.
Se trata de una tarea que implica un arduo trabajo semana a semana, pero aseguramos que la experiencia que estamos viviendo es altamente gratificante.
En los círculos de lectura nos dejamos interpelar por los libros y los pensadores que miran la realidad desde una perspectiva frecuentemente muy distinta a la nuestra; pensadores que conforman el pensamiento emergente. Buscamos profundizar la auto-observación y acceder a un proceso de transformación personal, ampliando la mirada y recogiendo nuevas distinciones.
Nadie dijo que sería fácil. Ya lo he sugerido en otras oportunidades: los caminos de crecimiento y de cambio no suelen estar asfaltados y, además, en este mundo de transformaciones permanentes desconocemos con exactitud hacia dónde nos llevan. No obstante, si seguimos nuestros valores más profundos y recorremos el camino intuitivo con convicción, prevalecerán nuestros mejores propósitos. El hecho de que este caminar sea colectivo puede llevarnos a influir decisivamente en la transformación positiva de la sociedad de la que somos parte.
Algunas reflexiones del primer círculo
En el primero de los círculos que lanzamos concluimos ya la lectura del primer libro: “Articuladores de lo posible”. En lo personal, me siento doblemente interpelado. Escuchar y leer las conclusiones compartidas por los circulantes me ha llenado de entusiasmo. Estoy plenamente convencido de que esta es una nueva forma virtuosa de acompañamiento.
Por ello me tomé la pequeña licencia de hacer algunos recortes de las extensas reflexiones de los participantes y, respetando su identidad, aquí las comparto. Te invito a leerlas hasta el final:
“He tomado del libro ideas para articular grupos diversos, para acompañar a los miembros de mi comunidad para distinguir lo que nos une, qué es aquello que juntos podemos hacer que por separado no podríamos. No podemos quedarnos como espectadores, debemos - y quiero - ser protagonistas del cambio: desde las comunidades el impacto es de mayor alcance y en menor tiempo.
Una vez leído este libro mi propósito se ha transformado y se ha ampliado para prestar mis servicios desde la escucha del propósito del otro y desde ampliar mi mirada, mi comprensión, y la mirada y comprensión de los otros acerca del contexto, también para gestionar el vivir en comunidad a partir de la gestión, co-creación y crecimiento de la diversidad.
Quiero pertenecer a comunidades que se co-crean y crecen desde un propósito común que se construye y se re-crea desde la diversidad, para producir acciones cotidianas en las que esté presente el "sentir" la grandeza del alma.
Siento confianza, ganas de protagonizar y acompañar a otros a ser protagonistas, ganas de articular desde el amor, el cuidado y el sueño de reconocer, y acompañar a otros a reconocerse, reconocernos para encontrarnos, complementarnos y trascender.
Articuladores de lo posible me ha servido para darme cuenta que he ejercido el poder y la política de forma inconsciente, y que ahora que lo sé, no puedo hacer otra cosa que ejercerla de manera consciente. Para hacerme y hacerle a otros las preguntas esenciales de la vida, en búsqueda constante de ese equilibrio y de ese propósito de vida atado a lo esencial, al “ser humano”. Para honrar la vida en toda su expresión. Para sentir confianza y convertirme en protagonista, desde mi conciencia y consciencia, y desde allí promover en mí y en otros sentirnos responsables del futuro: dejar de ser espectadores y convertirnos en protagonistas.
Me quedo con el compromiso de convertirme en Articuladora en todos los espacios en que puedo impactar para construir un presente y futuro mejor, promover espacios comunes para conversar con/de un propósito mayor, de la grandeza humana, conversar para leer el entorno, para complementar con otros la mirada del contexto, para accionar y transitar los espacios comunes, públicos, conversar para hacer posible la convivencia en donde todos soñemos con posibilidades que nos incluyan, que nos llenan de esperanza y confianza para vivir.”
“Revisar con periodicidad mi propósito para alinearme con él, hacerme la pregunta a la que nos invitaba Juan: "¿qué me pide mi futuro que haga hoy?". He notado cómo me lanzó a la acción y por momentos pierdo el rumbo por concentrarme en mirar los árboles, perdiendo de vista el bosque. Mirar los ámbitos donde soy articulador de lo posible para preguntarme cómo estoy inspirando; me doy cuenta que estoy en diversos equipos, ver cómo están alineados con un propósito más grande, observando qué nos hace humanos.”
“Ha sido una experiencia poderosamente nutritiva, marcadora, reveladora, sincrónica y en cierta forma una señal. El diálogo con el libro ha constituido un ancla de armonía. Lo aprendido me ha permitido darle un nuevo foco a mi restante tiempo vital. Me ha dado herramientas para incursionar con valor en un nuevo contexto pleno de incertidumbre. Me he dado cuenta de que mis miedos no pueden ser más una excusa. Pero también es gracias a que descubrí una caja de herramientas, "un escudo emocional de creencias", que me llena de valor y de un sí puedo y debo.
Me quedo con una magnífica caja de herramientas para actuar en contextos inéditos y complejos. Me quedo con un mensaje fuerte y claro de que no es aceptable ser un observador, la esencia del ciudadano radica en entrar en ese necesario espacio de ser y aparecer. Me quedo con una transfusión de esperanza, de claridad y hasta cierto punto de serenidad. Me quedo con el qué estoy siendo.”
“Quiero ser parte de la comunidad de coaches articuladores por un coaching serio en serio, hacedores de una práctica de coaching honesta y humana.”
“Me quedo en este encuentro de lectores articuladores con una mirada más amplia del poder personal, político, social, con el poder de la convivencia y el poder de las conversaciones. (...) Es el arranque para más proyectos sociales, o empresariales, para integrar comunidades de coaches, facilitadores, terapeutas o personas que se dediquen al desarrollo humano, en esta meta de ser más humanos y agradecidos con nuestro entorno.”
“Me quedo con un sabor a logro, satisfacción, me quedo con el amor y la entrega de mis compañeros , me quedo con la amorosa mirada de Juan quien nos ha llevado a elevar nuestra conciencia, ser más Humanos, y sobre todo atrevernos a ser protagonistas de los cambios que queremos y necesitamos generar en nuestro entorno. Me quedo con ganas de seguir avanzando para hacer de mi mundo y los que me rodean, un mundo más humano y tocado por el amor.”
“Culminado el viaje, culminado el diálogo. Un último capítulo pleno de reflexiones, con un poderoso llamado al pensar desde una Epifanía, y un reto a emprender nuestra propia reingeniería en el pensar y luego actuar. "Necesitamos desterrar la declaración de imposible."
Empezamos el siguiente libro y autor. A medida que vayamos generando más conversaciones, las compartiremos. Mientras tanto, desde el círculo de lectura, pensamiento y reflexión seguiremos internándonos en los conceptos de poder, política, diversidad, inclusión, sociedad, entorno y futuro. ¡Otros pensadores, filósofos y sociólogos nos esperan, y con ellos lo impensado nos espera también!